Clases no presenciales y trabajo remoto han marcado el inicio del año académico 2020.
Una completa estrategia para hacerle frente a la pandemia, es la que se ha implementado nuestra universidad, con el fin de resguardar la salud de toda la comunidad universitaria.
Es así como este 2020 ha estado marcado por el inicio de clases no presenciales como medida temporal, acompañado del trabajo remoto desde las casas, que está realizando cerca del 95% de los académicos y funcionarios administrativos que trabajan en la Institución.
Medidas que fueron necesarias de tomar y que involucran un compromiso de todos los que trabajan en el plantel, para que, pese a las circunstancias no habituales actuales, la Institución no pierda su espíritu de servicio, menos en estos tiempos de crisis, en el que el entorno confía en el aporte de la Universidad Católica del Maule a la sociedad.
Por ello, el rector de la UCM, Dr. Diego Durán, hizo un llamado a todos los que trabajan en la Institución a que desde el lugar en que les toque colaborar, sean agentes de ayuda. “Estamos invitados a iniciar este camino, desde el lugar donde estamos, la región, la ciudad, pero particularmente desde la universidad. Un espacio privilegiado en el contexto nacional, un espacio del conocimiento y de la reflexión, por lo que necesariamente estas características podrían orientarnos en nuestro caminar y en el protagonismo que quisiéramos tomar”, fue la motivación entregada por el rector.
Formando profesionales con calidad
La entrega y esfuerzo por brindar una educación sin ver mermada la calidad pese a la situación transitoria, se ha hecho latente en la comunidad que pese a la dificultad que conlleva el iniciar el año académico de forma remota, han demostrado una gran capacidad de adaptación y trabajo en equipo.
Así lo recalcó la vicerrectora académica Mary Carmen Jarur, quien señaló que “La disposición y voluntad ha sido muy importante en toda la comunidad, adaptando sus espacios de trabajo, muchos de ellos en sus hogares. En particular quiero destacar a los directores de Escuela, asistentes y todos los docentes, quienes se han preparado en muy corto tiempo, para entregar los tiempos y espacios (virtuales) de trabajo de manera continuar con el término del año 2019, y así mismo dar continuidad a los estudios de pregrado. Del mismo modo, todo el resto de las unidades institucionales han dispuesto soluciones a distancia para evitar la presencialidad”, destacó.
“Esta disposición -continuó-, es sin duda el mejor contexto para la formación de profesionales con vocación de servicio, ya que debemos hoy ser capaces de adaptarnos y ofrecer soluciones a los problemas que afectan a la sociedad. También debemos destacar el compromiso de las unidades que desarrollan investigación científica, cuyo significativo aporte no puede quedar atrás”, afirmó.
Palabras que también fueron reforzadas por la directora general de Docencia, Ana Jara, quien dijo que “Hemos ido aumentando progresivamente el número de estudiantes y académicos conectados, además se han ido incrementando la cantidad de recursos y materiales pedagógicos que se han instalado en la UCM Virtual…Obviamente que este primer mes es de adaptación, pero siento que hemos ido de menos a más”, sostuvo.
Así, con el aporte de todos, la UCM ha podido avanzar en sus propósitos institucionales, priorizando la salud y la vida de todos los integrantes de nuestra comunidad universitaria.